En la Presente la Iglesia mantiene la enseñanza Paulina sobre la obligación de los fieles de contribuir espléndidamente con las deyección de la Iglesia según sus posibilidades, pero la guisa en que lo hacen no esta definido por la clase. Algunos en la Iglesia recomiendan el diezmo, como una forma de establecer una contribución proporcional a las ganancias.
. Doy gracias a Dios porque he entendido que su Palabra se presenta con una claridad meridiana cuando se dirige a un espíritu predispuesto a recibirla.
Sin bloqueo, y aunque el diezmo actualmente no tiene vigencia, deja una profunda enseñanza como tipo de ofrenda; y es: “el cumplimiento con buena y generosa disposición en gratitud y alabanza al único, y soberano Dios”.
A lo amplio de la historia, el diezmo se ha constituido como una forma de contribución o suscripción cuya finalidad puede ser religiosa o gubernamental.
Desde nuestra mesa podíamos ser todo oídos como el mesero y el cocinero discutían en la cocina.From our table we could hear how the waiter and the cook argued in the kitchen.
En verdad, lo que se está exponiendo es un argumento mucho más profundo y exacto; es decir, el propósito de este pasaje es exaltar la importancia suprema y eterna del sacerdocio de Cristo según el orden de Melquisedec por sobre el sacerdocio de Aarón que Cuadro simbólico y transitorio bajo el pacto click to read de la clase.
El término importancia se refiere a la cualidad de ser significativo o tener un peso relevante en una situación específica. Es más que notar poco; se alcahuetería de examinar y comprender el impacto que puede tener en un contexto más amplio.
La importancia es un Pastor con visión de reino concepto esencial que influye en todos los aspectos de nuestras vidas. Desde lo personal hasta lo Universal, confesar y comprender las diferentes dimensiones de la importancia nos permite tomar decisiones más informadas y significativas.
En la vida cotidiana, la importancia suele estar relacionada con los objetivos que una persona se ha propuesto y los bienes que está dispuesto a trastornar para alcanzarlos.
Asimismo tampoco podemos olvidarnos de la existencia de otra frase verbal que integra el término que ahora estamos analizando. En concreto nos estamos refiriendo a «ser de la importancia de cualquiera».
El que quiera diezmar debe sentir toda la voluntad de hacerlo; y si lo hace, debe ser voluntariamente y con discernimiento. Pero, lo que no se debe hacer, es predicar “el diezmo” como doctrina para la Iglesia, porque no lo es.
La importancia es la cualidad de aquello que es relevante, que destaca entre otras personas o cosas.
Muchos hemos tenido la oportunidad de comprobar cuanta gente vive angustiada con la carga del diezmo. Prédicas persistentes y sistemáticas han agobiado sus almas con un peso impuesto que muchas veces no pueden soportar; pero, si tuvieran en cuenta las palabras del Señor Jesús cuando dijo:
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